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martes, 3 de enero de 2012

Lo que dice una mirada. Capítulo 5.

Volver a la normalidad es difícil, pero Carla hizo un gran esfuerzo para salir de aquella fuerte depresión, al menos aparentemente. Le costó mucho, aunque al final consiguió ir a clase con la mayor naturalidad que le era posible aparentar. En su interior seguía dentro de ese terrible agujero, su mente se negaba a aceptar todo lo que ella no quería que hubiese sucedido, pero eso desde fuera no se notaba, no había ninguna persona que la conociera tanto como para saber que algo ocurría; exceptuando a sus amigas, que pensando que sería mejor para Carla, dejaron pasar todo y no volvieron a sacar el tema de Raúl, ellas creían que todos sus problemas eran culpa suya, no se les pasaba por la cabeza que podían estar equivocadas.
El primer día fue extraño, no quedó con ninguna de sus amigas para ir a clase pero cuando se encontró con ellas les habló como si todo fuese normal, ignorando todas las llamadas que no les había cogido.
  • ¡Cariño! ¿Qué tal el verano Carli?
  • ¡Paula estás guapísima! Me encanta como te queda el flequillo recto. Y el verano, tirando...¿Y vosotras?
  • Nosotras muy bien, Paula y yo llevamos aquí un par de semanas; ya sabes, de fiesta, como siempre.
  • Cualquiera diría que eres la más tímida Lucía, ¡siempre estás de fiesta! Aunque Paula seguro que todos los días te dijo que sí.
  • Haber, estábamos de vacaciones, no le iba a decir que no... ¡Pero que no se acostumbre demasiado eh!
  • Tranquila Pau, sé que en época de clase no puedo contar contigo para ninguna fiesta...¡Suerte que con Carla sí!
  • ¡Claro que conmigo sí! ¿Cuándo es la primera?
  • ¡Oye! Yo también me apunto eh, la primera fiesta del curso es importante, ya me dijo Lucía que hay que empezar bien primero.
Entre bromas y riendo las tres entraron en el instituto, como siempre todo el mundo las miraba, eran las chicas guapas, divertidas y despreocupadas a las que todos admiraban; todo el instituto quería ser como ellas. Las tres chicas se sentaron en sitios seguidos y continuaron hablando, en ese momento nadie podía hacerlas callar. Siguieron pensando alguna fiesta para dar comienzo al nuevo curso, pensaron que podían organizarla ellas en la casa de alguna. ¡Iba a ser genial! ¡Sin duda, la mejor fiesta que iban a celebrar!
Pasaron así el resto de la mañana, bromeando, riendo, planeando la fiesta,pensando a quién invitar y dónde celebrarla, Lucía y Paula le contaron lo que habían hecho durante el verano y Carla se divertía con sus historias. Cuando le preguntaban que había hecho ella Carla contestaba que nada interesante, solo les contó que había roto con Raúl pero no les explicó los motivos, simplemente les dijo que no tenía ganas de hablar de eso. Para Carla fue un gran alivio ver que Raúl no había ido a clase, por suerte sus amigas y ella estaban en la clase A y él en la B.
Los siguientes días pasaron sin novedades, lo único raro fue que Raúl no apareció por clase en toda la semana, Carla empezó a preocuparse, sin que sus amigas lo notaran, claro está. No quería que se enteraran de que seguía enamorada de él, ni de que le pilló con otra, ni de las estupideces que estuvo apunto de cometer, ni de todo lo que le pasó por la cabeza en esos días de depresión. Resumiendo, ella no quería que sus amigas se enteraran de nada.
Antes de que pudiera darse cuenta ya había pasado la primera semana de clase, volvió el fin de semana, dos días de descanso. Durante esos días quedó con sus amigas y estuvieron planeando la fiesta, no sabían si invitar solo a 1º A o también a 1º B. La celebrarían el tercer sábado después de empezar las clases porque Lucía estaba sola en casa y podían hacer lo que quisieran ese sábado noche. Los padres de Lucía, a pesar de lo fiestera que es, confiaban en ella por lo que le dieron permiso para celebrar una pequeña fiesta de comienzo de curso. Las tres tenían muchas ideas en su cabeza, habría mucha gente, buena música, bebida y comida para todos,...
Con todo el tema de la fiesta Carla desconectó durante bastante tiempo de todos sus problemas, aunque ella en su interior seguía igual, sus amigas no sabían que le pasaba pero como son las personas que mejor la conocen algo sospechaban. Carla no sabía que el lunes siguiente iba a ser importante en su recuperación.

*Espero que os guste :) Aprovecho para recordar que si queréis podéis agregarme al tuenti (Loque Dice Una Mirada)  o seguirme en twitter (@LQDM_minovela) Gracias :D *

3 comentarios:

  1. Esta muy bien esta historia =)Sigue asi!
    Quiero saber ya cual era ese secreto!!!! jeje

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  2. Me encanta tú historia :)
    Ais quiero saber cual es el secreto ese :P

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  3. como continuaaa aiiinsss me reconcome la curiosidad y la intrigaaaa
    jooooo
    sigue asi no te rindas tu historia mola un monton y es muuy buenaaa
    X X X

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